Venían una a una
así, como sin centro
buscando aceras
burlando el tiempo
(¡con esas curvas!)
sueltas al aire
como corriendo
despotricadas
Yo me detuve
torciendo el cuello
puse la marcha
en retrovendo
y vi unas nalgas
en movimiento
y ya en la esquina…
(¡qué culo, santos!)
Aquellas piernas
(que eran dos faros)
se me eclipsaron
con la javilla
(¡maldita mata…
luego aquel auto!)
Qué mamasitas
(delicadezas)
para estos ojos
de Veterano
Tientaparedes
de hipnotizado
(¡pura ceguera!)
Vo’a’veriguá
Por qué no vieron
(no adivinaron)
que aquellas piernas
iban a doblar…
cuando doblaron.